En el ámbito logístico, gestionar eficientemente los almacenes es crucial para asegurar que los productos lleguen a su destino a tiempo. Para esto, los sistemas de gestión de almacenes (WMS) se han vuelto herramientas esenciales. Sin embargo, hay varios tipos de WMS en logística, cada uno diseñado para satisfacer diferentes necesidades y operaciones específicas.
En este artículo, exploraremos cuáles son los principales tipos de WMS en logística, sus características principales y los beneficios que ofrecen. Además, te ayudaremos a elegir correctamente el que mejor se adapte a las necesidades específicas de tu negocio.
¿Por qué es importante un sistema WMS?
Un WMS es un software diseñado para optimizar las operaciones en los almacenes, desde la recepción de productos y su almacenamiento, hasta el picking y envío, así como la gestión del inventario. Uno eficaz permite reducir errores, mejorar la eficiencia y aumentar la productividad en la cadena de suministro.
Los tipos de WMS en logística se diferencian por su nivel de funcionalidad y las características que proporcionan. Por esta razón, seleccionar el adecuado puede marcar una diferencia significativa en la competitividad de una empresa.
Para cualquier empresa, es fundamental conocer las opciones disponibles y cómo se alinean con los objetivos del negocio.
💻 ¿Te interesa conocer en profundidad qué es un sistema WMS y sus beneficios para tu operación? Lee nuestro blog: Sistema de gestión de almacenes (WMS): qué es y cómo optimiza tu operación
Principales tipos de WMS en logística
1. Sistemas WMS standalone
Los sistemas WMS standalone se centran exclusivamente en la administración de inventarios. Este software independiente no necesita integrarse con otros sistemas, lo que lo convierte en una opción ideal para pequeñas y medianas empresas que buscan optimizar sus procesos sin requerir soluciones más complejas.
La implementación de este tipo de sistema permite un control básico y detallado de las operaciones del almacén, incluyendo la ubicación de los productos, el seguimiento de existencias y la gestión de pedidos. Aunque carecen de integración avanzada con otros softwares de la empresa, su simplicidad y coste los hacen muy atractivos.
2. WMS integrado con ERP
Un WMS integrado con ERP es opción robusta y completa. No solo gestiona las operaciones del almacén, sino que también se comunica con otras áreas del negocio, como finanzas, compras y ventas.
Entre sus beneficios se incluye la visibilidad total de la cadena de suministro, lo que permite una planificación más estratégica y una mejor toma de decisiones. Además, elimina la necesidad de sistemas adicionales, reduciendo costos y la complejidad de mantener diferentes softwares.
3. WMS basado en la nube
Los WMS basado en la nube están ganando popularidad debido a su flexibilidad y facilidad de implementación. En lugar de depender de un sistema local, utiliza servidores en la nube, lo que permite acceder a la información desde cualquier lugar con conexión a internet.
Las empresas que operan en múltiples ubicaciones o que desean escalar rápidamente encuentran en este software una solución eficiente. Entre sus ventajas están la reducción de costos en hardware, actualizaciones automáticas y el hecho de que los datos están siempre disponibles en tiempo real.
4. WMS Open Source
El software de código abierto ha llegado al sector logístico. Un WMS Open Source es una opción para empresas que buscan flexibilidad y personalización sin tener que invertir grandes sumas en licencias. Con este tipo de solución, las organizaciones pueden modificar el software según sus necesidades específicas.
Sin embargo, la implementación de un sistema de código abierto requiere contar con un equipo técnico especializado capaz de manejar las personalizaciones y actualizaciones. Por esto, su uso más común suele ser en empresas tecnológicas o con grandes volúmenes de operaciones.
5. WMS automático
El WMS automático es la opción más avanzada en cuanto a la automatización de almacenes. Esto se debe a que no solo gestiona los procesos básicos del almacén, sino que también está integrado con tecnología robótica, como brazos mecánicos, vehículos guiados automatizados (AGV) y sistemas de cintas transportadoras.
Este tipo de software es ideal para grandes almacenes con alta rotación de inventario, donde la velocidad y precisión son esenciales. Además, aunque estos sistemas son más costosos, garantizan una eficiencia operativa superior al reducir el tiempo y los errores humanos.
Gracias a los robots de picking, un WMS automático puede optimizar las operaciones aumentando la precisión y reduciendo tiempos de procesamiento.
Factores a considerar al elegir un tipo de un WMS en logistica
Tamaño y complejidad de la operación
El tamaño de tu almacén y la complejidad de las operaciones son determinantes para seleccionar el WMS adecuado.
Empresas con operaciones pequeñas pueden beneficiarse de sistemas standalone, mientras que aquellas con múltiples almacenes o una alta demanda de integraciones podrían necesitar uno integrado con ERP o basado en la nube.
Presupuesto
El costo es otro factor clave. Los tipos de WMS varían en precio según la funcionalidad y complejidad.
Los WMS standalone suelen ser más económicos, mientras que los sistemas automáticos o integrados con ERP requieren una inversión más alta, pero ofrecen mayores beneficios a largo plazo, como eficiencia operativa y una mejor integración de procesos.
Flexibilidad y escalabilidad
Si tu negocio está en constante crecimiento, es crucial elegir un WMS que sea escalable y capaz de ajustarse a futuras demandas o cambios en la operación.
Los sistemas basados en la nube o de código abierto no solo brindan una gran flexibilidad, sino también la posibilidad de personalizar funciones según las necesidades específicas del negocio, facilitando la expansión sin complicaciones.
Integración con otras herramientas
Si ya utilizas un ERP, un sistema de gestión de transporte (TMS) o cualquier otro software logístico, es fundamental que el WMS que elijas pueda integrarse sin problemas con estas herramientas.
Esto evitará duplicación de tareas, mejorará la comunicación entre sistemas y garantizará una gestión más fluida y eficiente de toda la cadena de suministro, optimizando el flujo de información en tiempo real.
Capacidad de personalización
Algunas empresas requieren funcionalidades específicas para su sector o tipo de productos, lo que hace crucial contar con un WMS flexible. En estos casos, un sistema que permita una mayor personalización, como los de código abierto, puede ser la mejor opción
Ventajas de Implementar un WMS
Implementar un WMS trae numerosos beneficios para las operaciones logísticas:
- Optimización del espacio del almacén: Un WMS organiza los productos de manera eficiente, asignando ubicaciones óptimas según rotación y tamaño. Esto maximiza el uso del espacio disponible, facilita el acceso a los productos y reduce tiempos de búsqueda en el almacén.
- Mejora en la precisión del inventario: Al automatizar los procesos de gestión de inventarios, un WMS reduce errores humanos como conteos incorrectos o malas ubicaciones. Esto mejora la precisión del inventario, minimizando discrepancias y pérdidas, y proporcionando datos más confiables para la toma de decisiones.
- Incremento en la velocidad de preparación de pedidos: Un WMS optimiza los flujos de trabajo, disminuyendo el tiempo necesario para localizar y preparar pedidos. La automatización y la mejor organización agilizan el picking, aumentando la productividad y reduciendo tiempos de procesamiento.
- Mejora en la satisfacción del cliente: Un WMS eficiente asegura entregas más rápidas y precisas, lo que mejora la experiencia del cliente. Al garantizar que los productos lleguen en tiempo y forma, se refuerza la confianza del cliente en la empresa y su satisfacción.
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Conclusión
Elegir entre los distintos tipos de WMS en logística es una decisión clave que influye directamente en la eficiencia y rentabilidad de tu negocio. Es fundamental tener en cuenta aspectos como el tamaño de la operación, el presupuesto disponible y la capacidad del sistema para integrarse con otras herramientas ya en uso. Además, la posibilidad de escalar el sistema a medida que tu empresa crece es crucial para evitar futuras limitaciones.
Ya sea que decidas implementar un WMS standalone, uno integrado con un ERP o un sistema en la nube, lo más importante es que la solución elegida se ajuste a tus necesidades operativas y objetivos de negocio. Una correcta elección garantizará un mayor control sobre tus procesos y optimizará el rendimiento logístico a largo plazo.